jueves, 15 de octubre de 2015

El Imperio de Napoleón

Napoleón I Bonaparte (Ajaccio, 15 de agosto de 1769 - Santa Elena, 5 de mayo de 1821) fue un militar y gobernante francés, general republicano durante la Revolución y el Directorio, artífice del golpe de Estado del 18 de brumario que lo convirtió en primer cónsul  de la República el 11 de noviembre de 1799; cónsul vitalicio desde el 2 de agosto de 1802 hasta su proclamación como emperador de los franceses  el 18 de mayo de 1804, siendo coronado el 2 de diciembre; proclamado Rey de Italia el 18 de marzo de 1805 y coronado el 26 de mayo, ostentó ambos títulos hasta el 11 de abril de 1814 y, nuevamente, desde el 20 de marzo hasta el 22 de junio de 1815.

Durante un periodo de poco más de una década, tomó el control de casi toda Europa Occidental y Central mediante una serie de conquistas y alianzas, y sólo tras su derrota en la batalla de las Naciones, cerca de Leipzig, en octubre de 1813, se vio obligado a abdicar unos meses más tarde. Regresó a Francia y al poder durante el breve periodo llamado los Cien Días y fue decisivamente derrotado en la batalla de Waterloo en Bélgica, el 18 de junio de 1815, siendo desterrado por los británicos en la isla de Santa Elena, donde falleció.
Napoleón es considerado como uno de los mayores genios militares de la Historia, habiendo comandado campañas bélicas muy exitosas, aunque con ciertas derrotas igualmente estrepitosas. Sus agresivas guerras de conquista se convirtieron en las mayores operaciones militares conocidas hasta ese momento en Europa, involucrando a un número de soldados jamás visto en los ejércitos de la época. Además de estas proezas bélicas, a Napoleón también se le conoce por el establecimiento del Código Napoleónico y es considerado por algunos un «monarca iluminado» debido a su extraordinario talento y capacidad de trabajo. Otros, sin embargo, lo estiman un dictador tiránico cuyas guerras causaron la muerte de millones de personas, así como uno de los personajes más megalómanos y nefastos de todos los tiempos.
Se le juzga como el personaje clave que marcó el inicio del siglo XIX y la posterior evolución de la Europa contemporánea. Sus soldados lo llamaban el Pequeño Cabo , en tanto que los ingleses se referían a él con el despectivo Boney y las monarquías europeas como el tirano Bonaparte, el Ogro de Ajaccio o el Usurpador Universal.

El IMPERIO NAPOLEÓNICO

En 1804 fue aprobado un senado-consulto, convidado por un plebiscito (que consultaba al pueblo), por el cual el gobierno de la República se confía a un emperador hereditario. En este mismo año, Napoleón concentró mayor poder en sus manos al sustituir la Constitución del año 8 por la del 12.
En el Imperio europeo, Napoleón sería el emperador de reyes. Tras realizar casamientos entre miembros de su familia y nombrarlos reyes de Holanda, Westfalia, España, Nápoles,... se despierta el terror para los británicos; ya que si Napoleón ganaba en su intento Gran Bretaña caería; y si ocurría al contrario ellos seguirían bien. Napoleón funda la 4ª dinastía: "la oscura dinastía Bonaparte".

En el plano externo, Napoleón Bonaparte consiguió restablecer la paz por medio de victorias militares y de negociaciones diplomáticas, neutralizando a los adversarios de Francia. En este ámbito, uno de los aspectos más destacados del gobierno fue el acuerdo de paz firmado en el 1802 con Inglaterra, que ponía fin a años de conflicto, lo que aumentaría mas su prestigio. En 1804, Napoleón Bonaparte, que dos antes se había convertido en cónsul vitalicio, fue autorizado, por medio de un plebiscito, a asumir el titulo de Emperador de los Franceses.

LA CAÍDA DE NAPOLEÓN

La alianza de Bonaparte con el zar Alejandro I quedó anulada en 1812 y Napoleón emprendió una campaña contra Rusia que terminó con la trágica retirada de Moscú. Después de este fracaso, toda Europa se unió para combatirle y, aunque luchó con maestría, la superioridad de sus enemigos imposibilitó su victoria. Sus mariscales se negaron a continuar combatiendo en abril de 1814.

Al ser rechazada su propuesta de renunciar a sus derechos en favor de su hijo, hubo de abdicar, permitiéndole conservar el título de emperador y otorgándose le el gobierno de la isla de Elba, María Luisa y su hijo quedaron bajo la custodia del padre de ésta, el emperador de Austria Francisco I, y Napoleón no volvió a verlos nunca, a pesar de su dramática reaparición. Escapó de Elba en marzo de 1815, llegó a Francia y marchó sobre París tras vencer a las tropas enviadas para capturarle, iniciándose el periodo denominado de los Cien Días.
Establecido en la capital, promulgó una nueva Constitución más democrática y los veteranos de las anteriores campañas acudieron a su llamada, comenzando de nuevo el enfrentamiento contra los aliados. El resultado fue la campaña de Bélgica, que concluyó con la derrota en la batalla de Waterloo el 18 de junio de 1815.
En París las multitudes le imploraban que continuara la lucha pero los políticos le retiraron su apoyo, por lo queabdicó en favor de su hijo, Napoleón II. Marchó a Rochefort donde capituló ante el capitán del buque británico Bellerophon. Fue recluido entonces en Santa Elena, una isla en el sur del océano Atlántico. Permaneció allí hasta que falleció el 5 de mayo de 1821.

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